Pàgines

5.14.2010

Mi caaaasa... teléeefono!

La paleontología tiene mucho que decir al respecto de la vida extraterrestre. Si, aunque parezca mentira. Por un lado, quizás llegamos a un planeta cuya situación con su estrella y su composición lo hacen propicio para la vida. Y quizás llegamos y no vemos a marcianetes saludando. Quizás hemos llegado tarde, y si alguna vez hubo vida en esa roca, no la encontramos. Pero ¿y si efectivamente hubo vida en el pasado, pero se extinguió? Entonces entramos nosotros en juego: echamos un vistazo a la geología, establecemos correlaciones, planeamos una prospección y ale, ¡a buscar fósiles!

Aunque parezca que este post va sobre esa situación hipotética, lo cierto es que la implicación de la paleontología en la vida extraterrestre va más allá. De hecho, es algo que comparten la paleontología y la biología evolutiva: cómo hemos llegado a ser como somos. Hace unos meses, hablamos de algunas series de ciencia ficción, como Stargate SG-1, Stargate Atlantis, o Battlestar Galactica, y de cómo es muy improbable que evolucionen humanos en otro lado. Por resumir un poco, nuestra especie es fruto de muchas causas. Incluso la vida en la Tierra es como es (y ha sido como ha sido) es por la historia de nuestro planeta. La teoría del Caos nos habla de impredictibilidad de procesos complejos. Y este caso no escapa a su aplicación.

Si los homínidos nos pusimos de pie, probablemente es consecuencia de que en el valle del Rift, donde parece que habitaban nuestros ancestros hace pocos millones de años, los bosques estaban reduciéndose, a favor de praderas. Tener las manos con nuestro pulgar oponible es consecuencia de haber tenido un pasado arborícola. El propio dominio terrestre de los mamíferos es consecuencia de la extinción de los dinosaurios no avianos. El orígen de los mamíferos está ligado a las mismas causas que probablemente dieron lugar al orígen de los dinosaurios, en el periodo Triásico: heredaron una Tierra desolada tras la extinción de finales del Pérmico. Y así, sucesivamente. Por lo tanto, para que un marcianote tenga manos con pulgar oponible, debería de haber pasado por algo semejante. Y para que camine erguido. Incluso, si nos imaginamos que los extraterrestres son vertebrados, estamos asumiendo que han evolucionado de una manera demasiado paralela a nosotros. Recordemos, que de los veintipico phyllum de animales, solo un grupo dentro de Chordata ha llegado a formar un endoesqueleto de lo que llamamos “huesos”.


Por lo tanto, si hacemos caso de la Paleontología y la Biología Evolutiva, que un extraterrestre sea humano es un disparate (así que si alguna vez veis alguno, seguramente sea un Visitante con piel humana a modo de disfraz). Que tengan ojos como los nuestros, con sus pestañitas y todo, es otro disparate. Que tengan melenas y trenzas, aunque escondan un cable USB dentro, es otro disparate. Porque la vida que conocemos es la que ha llegado a ocupar cada habitat de este planeta. Y la historia de este planeta la ha modelado. Por lo tanto, querer que los alienigenas, vivan en Marte, en Kobol, en Pandora, en Tattoine o en Vulcano, sean como nosotros, o como alguna especie de animal de este planeta, es arriesgarse mucho: o estamos asumiendo historias planetarias demasiado paralelas, y el mayor caso de homoplasia del universo; o cometemos el error de pensar que la evolución es direccional. Y no, no es así.


Otro día seguiremos con este tema, meteoritos con fósiles, y demás fauna de la ciencia-ficción.

6 comentarios:

ome dijo...

jeje muy interesante!!
no sabia que los de avatar tuvieran un USB en la trenza, jajaja

Ahora estan poniendo la nueva version de V en el canal TNT: efectivamente los marcianos son tetrapodos, bipedos, con dos ojos y boca; demasiado antropomorfos a pesar de ser verdes debajo del disfraz?

Sergio dijo...

Creo que que tengan semejanza humana, o que sean casi humanos (véase el caso Michael Jackson) en todas las pelis y series que hemos deglutido es por falta de presupuesto y en muchos otros casos, por falta de imaginación...

Ferran Sellares dijo...

Yo creo que no es ni por falta de presupuesto ni por falta de imaginación ( o por lo menos, no sólo por eso)... Creo que es por el recurso de la identificación. Es más fácil sentir empatía por un ser humanoide, que por una masa babosa con sensores magnéticos.

Pabluratops dijo...

Hola!!
Muy buen post como siempre..
Preguntándome acerca de ficción y evolución, creo que H.G. Wells fue uno de los escritores que mejor aprovechó la fusión de estas dos disciplinas: Su empeño porque los marcianos de "La guerra de los mundos" sean diferentes a nosotros es impecable...e incluso los presenta como el punto más avanzado de su propia evolución como encéfalos gigantes ayudados por cuerpos mecánicos... Todo en la historia, los mótivos de los invasores para iniciar la guerra, como el funcionamiento de su organismo y hasta el inesperado final de su raza en nuestro planeta, se explica por términos evolutivos, es una verdadera delicia, leer y releer esa obra.

Y no se diga "La Máquina del tiempo"
es otra joya en donde hace gala de sus conocimientos de evolución: En el año 802000, existen ya dos subespecies de humanos y una de ellas es alimento de la otra...y todas evolucionan de la clase sociales presentes en la sociedad de aquella época. Wells era un demente, en el buen sentido, muy irónico en verdad y en el que se notaba muy fuertemente la influencia de Julian Huxley nieto
de nuestro ya conocido "Bulldog de Darwin"

Un gran saludo y gracias por dar paso a un tema tan interesante como este.

Koolasuchus dijo...

Y al otro extremo está SOLARIS.

Lacaze Zara dijo...

thanks